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El hidrógeno como apuesta de futuro mientras reciclamos el plástico

"Abandonar no es una opción. Nos estamos jugando un futuro que ya es presente, que será sostenible o no será.”

José Ignacio Asensio ha incidido en los dos proyectos a futuro que siguen la senda de la descarbonización en Gipuzkoa como son las apuestas por el hidrógeno y el polo del plástico reciclable. 

La planta de hidrógeno verde en Zubieta


“El hidrógeno verde está llamado a ser determinante en el proceso de electrificación y descarbonización de la industria y el transporte pesado” por lo tanto participar en su desarrollo teniendo en cuenta nuestro tejido industrial, es decir, muchos consumidores intensivos en energía, es fundamental. Por otra parte, destacaba José Ignacio Asensio, “es una oportunidad para conocer y profundizar en tecnologías y mercados de futuro”. El departamento de Medio Ambiente de la Diputación Foral de Gipuzkoa ha decido por eso formar parte del Corredor vasco del hidrógeno” impulsando una planta en Zubieta para producir este combustible alternativo a partir de la materia orgánica de los residuos urbanos” Serán los residuos orgánicos que depositan las familias en el contenedor marrón. 


El hidrógeno estará destinado al transporte de viajeros y a la flota de camiones de recogida de residuos. “Con la planta se podrá realizar una captura de C02 de los residuos por lo que alcanzará un balance de carbono negativo".  "En la fase piloto la planta generará 500 kilos de hidrógeno al día que abastecerán a 5 camiones de recogida de residuos y 5 autobuses de la flota de Lurraldebus.” La capacidad de generación de hidrógeno aumentará con el tratamiento de más residuos urbanos que en la actualidad es de 55.000 toneladas/año y alcanzará las 70.000 en 2030. Con la planta a pleno rendimiento se generará hidrógeno suficiente para abastecer toda la flota de Lurraldebus.
Contextualizando el valor estratégico del proyecto, J. Ignacio Asensio recordaba que el 46% de consumo de energía y emisiones de Gipuzkoa es achacable al transporte por lo que su descarbonización es clave para llevar a cabo la transición energética. 


Polo de Innovación de la Economía Circular del Plástico en Zumarraga.


José Ignacio Asensio se ha detenido también en el proyecto de reciclaje del plástico. Un proyecto en colaboración con la empresa Plastic Energy que se basa en la creación de una planta que tratará más de 30.000 toneladas de plástico no reciclables a través de las tecnologías habituales.


Las nuevas tecnologías que se aplicarán convertirán el plástico en el aceite TAKOIL que se utiliza para la generación de nuevos plásticos de forma sostenible. “La planta de Zumárraga, aportará a las empresas, siguiendo todos los requisitos medioambientales de productos para el envasado de alimentos. La materia prima usada tendrá las mismas cualidades de las utilizadas hasta ahora sustrayendo recursos naturales".


El proyecto cuenta con una dotación del Departamento de Medio Ambiente de la Diputación Foral de Gipuzkoa de 5 millones de € y se ha presentado a los fondos Next Generation. De la misma manera la inversión final contempla 80. Millones de € directos en la planta y la creación de 40 empleos directos.


Remarcaba una y otra vez José Ignacio Asensio que “todos tenemos que pasar a la acción” no importa nuestra envergadura, pero lo tenemos que hacer y lo estamos haciendo con “una planificación de la gestión climática” para “ver y aprovechar las oportunidades de la transición energética” y transmitirlas a la sociedad. “Todos querremos participar en las ventajas del proceso y necesitamos aliados en este camino.” Y “mantener el camino y perseverar. Abandonar no es una opción. Nos estamos jugando un futuro que ya es presente, que será sostenible o no será".